El agua constituye de media el 60% del peso corporal, siendo el mayor componente del ser humano y se distribuye por todos los tejidos. Es fundamental, sólo se puede vivir unos pocos días sin ella. Desempeña múltiples funciones:
- Transporte de nutrientes
- Eliminación de residuos
- Control de la temperatura corporal
- Estructural de las células, etc
El proceso de absorción es muy rápido, en unos 5 minutos aparece en el plasma. Tiene pérdidas constantes, pero se regula eficazmente el equilibrio gracias al control del volumen y concentración de la orina, cuya función es excreción de residuos y mantenimiento del equilibrio hídrico. Debe de haber un mínimo de expulsión para poder eliminar los desechos. Se sugiere un volumen de orina de mínimo 1.5 litros al día para un buen funcionamiento. Los estudios demuestran que altos volúmenes de pis ralentizan el envejecimiento renal y protege de enfermedades renales crónicas. Observar el color de la micción, nos puede orientar acerca de nuestro estado de hidratación (muy oscura o concentrada es un déficit). La ingesta de agua ideal diaria depende de múltiples factores, pero de media se recomienda de 2.5 a 3 litros. Una falta de este líquido, facilita lesiones musculo – articulares, al perder elasticidad el tejido conjuntivo